lunes, 30 de junio de 2008

50 y 50

Artificialmente siempre perseguimos imitar a la naturaleza. El pintor mediante un cuadro retrata un árbol en un plano unidimensional, la tecnología permitió darle profundidad, agregarle dimensiones 2, 3, pero por mayor efecto que se sume no será igual a aquel que se puede tocar con las manos, oler y escuchar el chacotear de sus hojas cuando corre una leve brisa.
Lo mismo sucede con la música que tomó vida cuando el hombre buscaba obtener con distintos objetos, los sonidos de la selva, de la jungla, o el lugar que habitaba. En un momento el sonido, acústico por naturaleza, logró transformarse en corriente eléctrica mediante avances tecnológicos, para luego ser amplificado y ser escuchado a la distancia. Al igual que la pintura primero fue unidimensional (sonido mono), bidimensional (estéreo) y finalmente el tan popular “Sorround” que intenta enviar sonidos desde distintos puntos en un ambiente para dar la sensación de sonido envolvente.
Por más que se insista y se tomé con soberbia distintas posiciones desde la ciencia y tecnología, no es probable que se iguale las características naturales del mundo, desde lo creado por el hombre y la mujer.
La realidad virtual, robots, imágenes tridimensionales y lo mas avanzado en conocimientos tecnológicos apenas sirve como forma de distracción, entretenimiento y ocio para la vida. Las ciencias médicas, desde la biología y microbiología tardarán muchos siglos más para entender el funcionamiento del cuerpo humano, otros seres vivos y distintos organismos.

Esto puede tener un final feliz cuando entremos en razón y tomemos conciencia que no podremos alcanzar la sapiencia de la naturaleza y mucho menos superarla.
Es por eso, quizá, que se hayan tomados caminos paralelos pero adversos a la vez, que crean distintas realidades.
El hombre logró distorsionar el verdadero sentido de lo natural, creando un mundo artificial para distraer a las sociedades del sentido único de la vida. Ésta mitad, el 50% inventado por la mente humana, busca plagiar lo ya inventado, lo conocido.
De la inocente ciencia y tecnología del entretenimiento, nació lo peor del colono pensamiento fundado en la ambición; La economía, como fuente agotadora de fracasos, es el principal enemigo y causa fundante de la realidad física que sufrimos en la actualidad.
Ésta pelea que tiene miles de rounds, pero que por barbarie el hombre disimula y alarga la lucha entre sus contrincantes, tendrá su fin cuando se vuelva a lo natural, a lo esencial. En el ring se verá el último round, cuando dejemos esas ambiciones, para nada naturales, que se adueñaron de la vida.
Ambición, poder, muerte, son sinónimos que convergen en el hombre mediocre y pone ante todo su desinterés en aquello que le dio vida.

Podremos algunas vez dejar de tener cotos territoriales, que diferencien mediante nombres artificiales, al “viejo continente” como la Unión Europea, al “nuevo continente” como América latina y América del Norte, y así sucesivamente con los distintas parcelas continentales que forman el mundo?
Es difícil, será muy complicado, mientras la ignorancia y la ambición y todas las miserias del hombre sigan seduciendo nuestra forma de vida.
Lo que ocurre tan solo en nuestro país con algunos arrendatarios del campo, es un ejemplo claro que no podremos salir de esas miserias humanas.
Lo mismo sucede con la UE que prohíbe el ingreso de inmigrantes latinoamericanos y otros continentes, mediante leyes que dictan cárcel, a aquellas personas con ansias de emprender nuevos rumbos en esas tierras.
Las guerras económicas desde el norte, impuestas por lo armamentístico, da una imagen del pensamiento contemporáneo. Éstas resultantes vomitivas, nos separan, nos incomunican, éste cáncer mundial nacido del propio no-pensar del hombre, comete el genocidio principal de la raza humana.
Martín Suárez

lunes, 23 de junio de 2008

Una cuestión de género o de conciencia?

Mujer 1 - ... si, y tu hijo como anda?
Mujer 2 - Bien muy bien en éstos momento está en el laverap, dejando la ropa sucia y después la pasa a buscar a la tarde.
Mujer 1 - Ahhhh y si Eduardo, mi hijo, también ayuda a mi nuera, cocina, lava, plancha.
Mujer 2 - Que cosa, sin palabras, que se le va a hacer...
Mujer 1 - Hasta la nena colabora y mi nieto también, junta la mesa y pone los platos en la pileta...
Mujer 2 - Y tu nuera que hace?
Mujer 1 - Ella trabaja, solo 9 horas en un estudio jurídico, pero cuando llega dice que está cansada..
Mujer 2 - la mía también, pero trabaja a la tarde... ya van a cambiar las cosas.
Mujer1 – bueno chau hasta luego.
Mujer 2 - saludos a tu marido chau.

Para los que entran asiduamente a éste blog les aclaro que no me voy a dedicar a la literatura de novelas, cuentos y todo eso, por el momento no, éste dialogo lo escuché hoy temprano en la panadería que está cerca de mi casa. Lo platicaban dos señoras, que conozco de vista, y enseguida me sentí identificado, pero muy bien identificado, es decir positivamente identificado con éste tema.
Se preguntarán por qué digo “positivamente identificado”, porque cuando uno sostiene un pensamiento con la práctica, aclara su situación interpersonal, al darse cuenta que no se engaña así mismo.
En éstos momentos convivo con mi compañera y compartimos absolutamente todo, charlas de varias horas, pensamientos (de vez en cuando), actividades, estilo de vida en pocas palabras. Pero lo que hoy he tomado conciencia es que no ayudo en los “quehaceres domésticos”, no, no ayudo para nada, hago.... mi compañera lo hace a la par y como si fuera un circulo vicioso, yo lo hago a la par de ella. Seguramente nace esa pregunta del conciente y dirá qué quiero decir con esto, simplemente que uno hace o no hace en cuestiones de iguales. La palabra ayuda en, por ejemplo éste caso, implica no tomar conciencia que va a hacer muy difícil salir de la práctica machista.

Que linda palabra, machista, machismo, ahhh pero está la otra también, feminista, feminismo, como si fueran pocas las fronteras y límites que marcan diferencias entre hombres y mujeres a esto le agregamos una nueva piedra política. Si leyeron bien, POLÍTICA, por que no es ni más ni menos que eso y como toda actividad política debe realizarse con conciencia.
Necesito aclarar, estoy en la obligación de hacerlo, que en temas de género (femenino, masculino) no puede hablarse de conciencia, o por lo menos de una buena conciencia, porque no se tiene. Todavía se mantiene ese rancio pensar, que la nena lava los platos... y el nene? A no... el nene tiene que ayudar al papá en el taller del fondo de casa, haciendo cosas de hombres.

Ése dialogo entre dos mujeres en la panadería, me puso en la situación placentera de comentar y analizar nuestra actual situación respecto a éste tema. Señoras, señores, esto nunca podrá cambiar, mientras mi género preferido y amado (aclaro, el femenino) siga siendo el sostén, la estructura principal de mantenerlo en pie, que el diálogo entre esas dos señoras, mientras realizaban las compras, tenga un contenido machista, superior que el que pueda contener el diálogo entre dos hombres, no me resulta extraño ni he escuchado nada nuevo.
Tengo en claro que, lógicamente, no todo el género femenino tiene pensamientos que refuerzan la idea machista, pero los invito a una interesante actividad de observación, usted señor padre de un hijo y una hija, o vos compañero, joven, o amigo que tienes una hermana, una novia o una amiga; la señora de la casa después de una rica cena... a quién le pide que la ayude con “los platos”?
Si verdaderamente queremos terminar con las diferencias POLÍTICAS de género, que desembocan en discriminación, tanto el femenino como el masculino tienen que evacuarse de irresponsabilidades, que su media naranja no se convierta en ¼ ni mucho menos, simplemente en su exacta mitad.
Martín Suárez

jueves, 19 de junio de 2008

Neuro-prostitución

La ley del menor esfuerzo mantiene sus raíces sólidas y agranda su región día tras día. Se aplica en lo laboral, en el amor, se encuentra en el habla en la escritura, en toda actitud cotidiana que el hombre y la mujer realiza o deja de hacer.
Ésta imposición que está “a la moda” implica despojarnos de nuestra claridad y contrarrestar lo que en un principio nos hacia bien.
La nueva ley del menor esfuerzo, se muestra como ejemplo para llegar al éxito, los aparatos mediáticos nos muestran a diario como ser una estrella exitosa, sin previa preparación, con nulo parlamento y pensamiento.
Pero hoy no solo encontramos que el medio “educa” a nuestros pares para no estudiar, no prepararse, no ser un agente participativo político, también ha implementado sus potencias para prostituir neuronas.

Las grandes empresas del mundo se mueven con las libertades que necesitan no solo por su caudal económico que les da poder, sino además por la compra de mentes despojadas de pensamiento crítico, confundidas hasta en la esencia misma de la vida, homologadas y normalizadas por “Normas” que alienan pensamientos y los remite a un punto de fuga.
Hoy no se necesita de medicamentos sedativos, tampoco se requiere de aquella vieja costumbre que tenían los manicomios que era la aplicación de corrientes eléctricas con ventosas en la sien, en este momento el contrabando de mentes, que se realiza con la compra, uso y abuso de neuronas mediante los medios de comunicación, está de moda.
Frases como ...”con los milicos estábamos mejor” ,”mano dura a los delincuentes”, ”hay que matarlos desde chiquitos” la tan mentada,”algo habrán hecho” una más contemporánea “todos somos el campo” y otra que mis oídos llegaron a escuchar en voz de algunos grupos políticos que pertenecían a la izquierda, (como el movimiento MST, el PCR y su Corriente Clasista y Combativa la CCC, entre otros) “campo, patria o muerte”... son enunciados armados por los proxenetas del pensamiento mediático, pero claro está, que éstas agrupaciones saben muy bien lo que defienden.
Lamentablemente esas frases tan escuchadas, nos demuestran que la "Neuroprostitución" trabaja las 24 horas.

Pero lo que aún me resulta más extraño y doloroso, es que algunos amigos, compañeros y educadores que tuve en la vida y muchos de ellos con pensamientos propios, hayan negociado su pensar desde la omisión , han entrado en el negocio de la “neuroprostitución”, lamentablemente y esto me causa mucho dolor, pasaron a ser soldados de la voz útiles al sistema mundial.
La falta de medios que contrarresten los efectos facinerosos de los monopolios mass mediáticos es el factor principal de éste viejo negocio de la “neuroprostitución” que últimamente ha fortalecido sus mensajes y ya no son casi imperceptibles como años o meses atrás, hoy son directos, no esconden su ideología, no ocultan su negocio, no disimulan su prioridad.
Como todo negociado con altos niveles de recaudación de dinero, hay víctimas que padecen las consecuencias, el de la “neuroprostitución” no es ajeno a esto, es el emisario principal de borrar la memoria, inmiscuir diferencias y enfrentamientos difusos, a mentes despiertas, pero dañinos para aquellas que reposan en tempestades.
Lamentablemente en Argentina, nos encontramos en el peor momento de la ecología mental, la ley del menor esfuerzo está más que nunca en práctica, se perdió el mínimo atrevimiento de pensar, con medios propios, con ideales propios y con voluntad de hacerlo.
Martín Suárez

miércoles, 11 de junio de 2008

Con otra ropa

“El camaleón mamá el camaleón, cambia de colores según la ocasión”. Sabía que en algún momento ésta letra de Chico Novarro, iba a ser de utilidad, no seré el primero ni el último que utiliza ésta frase tan trillada para explicar que está ocurriendo en nuestro país.
Década del 90, en la televisión Argentina se observaba un nuevo formato que "revolucionaba" lo conocido, empezó como un simple programa de deportes que hacia un resumen de las distintas actividades, fútbol, boxeo eran sus principales estrellas. Con el tiempo éste programa televisivo fue agregando bloopers, bromas, los peatones de Capital Federal eran sorprendidos por personajes que, supuestamente se reían con ellos y no de ellos.
Éste formato que hizo conocido el hombre de Bolívar, Marcelo Tinelli, fue ganando adictos que poco a poco se olvidaban de los problemas cotidianos, se entretenían con las chicaneadas, y blanqueaban su mente para reducir su panorama solo al ocio cerebral.
Ese programa que asumió en sus comienzos el rol de “algo distinto”, fue devorado por el mercado mediático, su número de audiencia crecía día a día, en pocos años el conductor paso de ser un simple bastonero presentador de notas y bromas, a un mega empresario.
Qué es lo que aquí ha sucedido, se habrán preguntado muy pocas personas, algunos dirán “éste pibe la tiene re-clara” ó “se lo merece tiene una mente brillante para la conducción y producción televisiva”...

Si medimos su éxito en millones de dólares, les aseguro que es uno de los hombre más exitosos y destacados de Latinoamérica, si evaluamos las consecuencias de su éxito, les afirmo que van a entender el porqué muchos de nuestros amigos, parientes, conocidos y demás personas, no tienen una participación vinculativa con distintos temas de nuestra sociedad y solo los motiva la diversión, el sexo que observan en sus hogares, junto a su esposa, hijos, padres, mediante la prostitución mediática de personas, que por el mero hecho de estar en boca de todos, muestran sus cuerpos desnudos y excitan a multitudes de jóvenes y no tanto.
La idea primigenia de éste formato fue vendida al poder de turno que se ahogaba en baba al enterarse que millones de personas observaban sus contenidos y ya no hablaban de economía con sus compañeros de trabajo, no discutían con el mismo fervor problemas políticos y sociales con sus amigos, poco a poco sus mentes se alejaban de los verdaderos problemas y sus bocas se enmudecían con una censura renovada.
Como se habrán dado cuenta, no descubrí el continente americano con éstos párrafos, pero tampoco los escribí para hablar de éste nuevo “soma” que llega a nosotros mediante ondas electromagnéticas transformadas en imágenes en nuestro televisor; lo que me preocupa es otro tema donde a los que no les importa la salud, la educación, el hambre, la inclusión, la vida y la muerte, mas conocidos con el nombre de “la derecha”, se adueñan de ideas y actitudes que en un momento eran “progre”.

Como siempre la antípoda de la mayoría se apoderó de las tendencias que más cantidad de fieles comprendía, y los tiempos que corren utilizan las mismas mañas.
Los gremios del campo, hoy fueron denominados como “la nueva derecha” en algunos medios, más precisamente en “Página 12”. Si bien queda atractivo como título para un informe periodístico, yo me cuestiono, pueden jactarse de modernos, aquellos que contribuyeron a todos los golpes de estado conocidos en nuestro país? Pueden ser llamados novatos éstas personas que piensan egoístamente en sus capitales? Deberían ponerse en la categoría de innovadores a De Angelí, Llambías, Gioino, Buzzi y Miguens? Éstos hombres que en los últimos noventa días renovaron contrato con el hambre, la muerte y la indiferencia, utilizaron esas técnicas de apropiación de ideales que nada tienen que ver con su forma de vida, con su pensamiento.
En su boca escuchamos que lo que ellos hacían era un nuevo grito de Alcorta, que estaban forjando una revolución desde el campo, que todos somos el campo y un raudal de apropiaciones en nombre de sus exagerados caudales. Nuevamente los enemigos de los más pobres, se disfrazan con ropajes ajenos y se camuflan según la ocasión. Éstos nuevos tiempos de confusión y de mentiras que quieren ser verdaderas, son los “nuevos” peligros que el hombre pensante debe enfrentar, conocer el pasado para reflejarlo en nuestro presente, no caer en el disimulo impuesto en la caja boba, no escuchar las palabras de aquellos, que al igual que el Diablo, mezclan mentiras y verdades para ser protagonistas de un nuevo robo del siglo, que solamente acarrean el pensamiento de masas hacia ideas que se resisten a la vida.
Martín Suárez

martes, 10 de junio de 2008

Sin pronóstico

Casi 30 años de vida me dan la certeza que la codicia del hombre nunca acabará. Lamentablemente veo a diario que esas miserias mutan, cambia de color, según de que lado encuentre uno su riqueza.
No es un simple y sencillo punto de vista, es estadísticamente exacto.
Hay personas que creen todavía en aquellos autores, músicos, letristas, escritores, pensadores, que en sus trabajos al ser leídos encuentran futurología, tratandosé de un tema contemporáneo, o actualidad si es que esos pensamientos se redactaron hace muchos años. Es más sencillo y cómodo pensar que algunos hombres posean esas sensaciones místicas porque si se diera lugar a una segunda opción, sería punzante para todos. Es por eso que las creencias del hombre, muchas veces se basan en el miedo al propio reconocimiento.
Podrán señalarme que existen letras de compositores de tango, por ejemplo, donde expresan que “el mundo fue y será una porquería”... algunos hombres que se llaman asimismo videntes, futurólogos, vaticinan golpes de estado, o el propio Nostradamus, denominado como el más grande de los profetas, con palabras confusas hasta puede pronosticar algunas guerras, o mejor dicho el hombre puede interpretarlas.
Si desterramos esa creencia de la existencia de personas con esencias ”antinaturales”, nos queda esa segunda opción mencionada, la misma tiene sus bases en la mediocridad del hombre.

Si nos ocurre lo mismo que nos dijeron que iba a suceder, si vemos que distintos sectores se agrupan para derrocar un gobierno como alguien pronóstico en su momento, si la crisis económica está fagocitando el hambre como lo anticipó el económico, no es culpa del destino es equivocación de los administradores del mundo y de los que dejan administrarse, si en el preciso momento que esto ocurre a nuestra memoria llegan las palabras de alguien que lo vaticinó, es que el hombre, la raza humana, por avaricia, codicia, ambición y falta de sensibilidad al prójimo, no evolucionó, sus acciones son cíclicas, se reciclan para emplearse de la misma manera, en pocas palabras sentó sus raíces en la mediocridad.Que el mundo cambie, no depende de un canje de sistema, hasta el régimen más xenófobo no persistiría si el cambio está en nuestra conciencia.
Martín Suárez